Todo tiene un fin y también tod cansancio tiene su propio descanso. Terminé una etapa muy linda con niñas que al principio no quería ni una pisca. Pero que en el fondo y como todos saben, se robaron hasta el último pedacito de mi corazón.

Claro!, fue una etapa llena de cambios y de oscuridades varias, de reflexión e introspección, en donde mi corazón se encontraba aun en tierras araucanas y vivir en Chillán resultaba ser un verdadero asco.

De pronto, me vi escribiendo muchas veces de lo mismo. De procesos y despedidas, pero no tenía en cuenta todo lo que se me había sido regalado en este tiempo.

Creo que lo más lindo, fue haber ganados dos familias nuevas. La familia de Schoenstatt Chillán, con todo lo que eso implica, como tb, la Familia Figueroa Valdes. Pese que q me agarre de las mechas con la Vale y que muchas veces no la quiera ni ver (sorry Vale, si lees esto sabes muy bien lo que hemos pasado), o deteste con toda mi guata corazn a nico por lo cargante que es...siento la alegría de haber conocido personas maravillosas y que estoy segura, se quedarán por mucho tiempo.

Pero com lo he mensionado antes, los procesos y las necesidades básicas y emocionales cambian y claro, necesitaba un cambio o más bien asumir una nueva realidad. Por lo mismo, mi etapa en las Aliadas ha concluido y ahora otra mision en mi vida, trabajar completamente con las Universitarias (aunque las encuentre fomes y no me guste mucho el carisma de esta rama), se muy bien que pasado un tiempo las terminaré amando.

Ho me siento feliz y con una tos desesperante que no me deja estar tranquila. Tengo en mi pared un Dragon dibujado por un paciente, se llama Rafael...Rafael el Dragon...

Es lindo lo que estoy viviendo y me siento feliz...el temor a lo desconocido dura solo el saltito y el impulso que tomamos al darlo. Yo tomé mucho impulso y por lo mismo, llegue a parar más lejos de lo que pensé!

Entregada a los Planes de Dios...El se encargará de lo que hoy estoy viviendo...

Lindo, pero distinto...

=)

muackis!