miércoles, septiembre 21, 2005
¡¡Quiero Ser tú Corona!!
¡Reina Tres Veces Admirable, nosotras somos tu corona viviente!"
Hace mucho tiempo esperaba sentirme así. Sentirme nuevamente llena de "algo" que no se puede ver ni explicar, sólo sentir. Ese "algo" que me hace sentir tan livianita como una pluma y tan iluminada como un farol. Recuerdos que me hacen suspirar en vez de llorar. Bromas de antaño y cariños gratuitos. ¡Qué Predilecta me siento!
No puedo dejar de mirar los meses de Marzo Abril, meses en que la pepita de azúcar flor se escondió del mundo y se refugió en el propio. Meses donde opté por tomarme tiempos tan solo para pensar, evaluar, reevaluar, conocerme o reconocerme, perdonar y dejar partir, amar sobrenaturalmente, educar mi fidelidad y renobar mi Sí. Ese Sí, se escuchaba muchas veces como un susurro o era aveces como en aquellos sueños donde se quiere gritar y no sale la voz o se quiere correr y no se avanza.
Te regalo un corazón que ama aún cuando sufre.
Te regalo la disposición de ser una pequeña María aún cuando los otros se burlen.
Te devuelvo el don de sufrir con alegría
Te doy Gracias por el don de un amor profundo por nuestro Padre Fundador.
Por el don del valor para luchar.
Por el don de la libertad interior.
Por don de la pureza, la pequeña irradiación de la Immaculada.
Te devuelvo el don de la cálida atención hacia los demás.
y sobre todo, el don de decir una palabra que sea un regalo para los demás.
Todo es mérito de alguien a quien queremos mucho!
y quien pide ser su Corona Viviente!
Mil Gracias por Ayudarme a entegar mi Capital
y confío que este recaerá hacia quienes leerán esto
Mil Gracias
Sin Ustedes...la Corona no sería tal
y no podría sentirme nuevamente
una
PEQUEÑA MARIA