jueves, septiembre 08, 2005

Mañas



Hoy, más que nunca me he sentido una niña de 7 años o menos. Mirando el suelo mientras me retaban por haber ido a skiar y yo quería decir..."pero doctor, es que no me aguanté". Creo que el Doctor me retaba como cuando un grande reta a un niño por una maldad y yo solo miraba el suelo, diciendo: "si yo me la busqué".

Sentí dolor!, el pinchazo fue fuerte. Me sentí castigada por no cuidar mi rodilla y se me venían todos los: " Te dije que no fueras!". Me acordé cuando el P. Stefano explicaba las cruces de la vida. Decía que éstas eran como cuando de niña te caías y tenías miedo a que te hechen alcohol, porque sabes que va a doler. Entonces te obsesionas por seguir jugando y haciendo las cosas que sabes que no tienes que hacer, hasta que llega el momento del dolor en la herida y te das cuenta que ya está infectada y lo peor te hechan yodo y te retan, en el fondo, sufres más por querer evitar. Ahora mi dolor es fuertísimo. Creo nunca haber sentido un dolor físico tan fuerte. Me doy cuenta lo pequeña que soy, hay dolores mil veces más grandes y yo a penas puedo con este!.

He tratado de no quejarme y sólo ofrecer. De calmar mis mañas por tener que usar esta férula antiestética y no poder saltar ni menos ir a skiar este fin de semana. He decidido abandonarme y obedecer. Me quedaré quieta pues, quizás necesito este momento de quietud. Caminaré sólo si la pierna se duerme para despertarla. Creo que sólo así dejé de rabiar y hechar fuego. Nuevamente Dios me enseña a ofrecer, cuando creía que mi entrega era excelente, me enseña que No. Es en lo pequeño, donde cuesta más.

Es tan coherente. No me gusta la quietud. No me gusta sentirme atada y dependiente. No me gusta privarme de cosas que quiero hacer. No me gusta que me hipervigilen. No me gusta!.

Hoy aprendí aprendí muchas cosas. Pasé de lo idiotita, a las mañas, del enojo al descargo. En silencio, quizás no lo decía o lo susurraba, pero si lo sentí. Luego me dio pena no poder correr, caminar, saltar, skiar o incluso estar sentada como la gente y sólo por una semana!. Valor!

Hoy aprendí, de mi pequeño dolor de que lo que mata la vida no es éste, sino la tristeza y que no es fácil aceptar que nuestra vida debe pasar tambien por el dolor (merecido o no). Pero en el fondo, el dolor nos cambia, nos transforma y en nuestras manos y corazón está que sea para mejor.

Hoy aprendí que no quiero pasear por las calles como un ser triste, sino como un alma llena de calma, que sabe saltar en las calles con agua o mojarme por completa sin dejar de sonreir, aun encrespandose el pelo...eso es otro GRAN dolor!

Es lo de hoy y moraleja: Cuiden sus rodillas!, son tan útiles!..........

¿No lo habían pensado nunca?...Entonces den GRACIAS por ellas.

Miles de besososososos al cubo al infinito y todo mi aprendizaje de hoy!.


Posted by Solcita :: 9:00 p. m. :: 3 Comentarios:

Deja tu Huella

---------------oOo---------------

Eres la Visita Numero...